Por Carmen Gastaldi
“Qué lindo que es soñar, soñar no cuesta nada.
Soñar y nada más,
con los ojos abiertos
Qué lindo que es
soñar y no te cuesta nada
Más que tiempo…”
Kevin Johansen
La consigna de hoy
podría ser: “Siempre hay un antes y un después”. ¿Y cómo podemos valorar estas
dos situaciones?, ¿desde el antes o desde el después?, ¿filosófico?,
¿metafórico? Y, planteándolo así, lo parece; porque nos está faltando algo y
sería ¿de qué? Antes de qué o después de qué. Estos “de qué” constituyen
innumerables situaciones a partir de las cuales se van produciendo cambios en
nuestras vidas, mientras seguimos adelante. Estos pueden ser buenos o no,
placenteros o no, importantes, etcétera, etcétera.
Bueno este “de qué”
para mí fue re-placentero. ¿De qué estoy hablando? De nosotros, de todos
nosotros.
Antes no tenía el
placer de conocerlos y ahora, después de haber compartido estos martesitos acogedores, íntimos,
contenedores, llenos de historia, de evocación, puedo decir que algo sé de
ustedes. Que me emocionaron, que me sorprendieron. Que me encantó escuchar y
leer sus historias, tan parecidas y tan distintas, porque cada uno de nosotros,
en similares momentos, ve la vida desde su propio ser individual y único. Ese
mismo ser individual y único que nos permite recibir estos relatos e ir
formándonos una pequeña y aproximada idea del “Otro”.
Susana O.:
detallista, minuciosa, dramática.
Luis Zandri:
enamorado y musical.
María Victoria:
cronista, fresca, concisa.
Ana Miquel: realista
y espiritual, arraigada.
Alberto Nicolorich:
silencioso, evocativo, paisajista.
El profe, al medio. Se declara algo tímido.
Creo que todos tenemos algo de eso. Pero José, ahí, siempre estimulándonos,
marcando formas, modos, sugiriéndonos temas para encontrar historias en
nosotros mismos. Buscando, escrudiñosamente esa palabra, hum, esa, la justa, la
que él sabe que nos va a movilizar.
Ana Inés: familiera,
espontánea, positiva.
María Rosa: traviesa, profunda, expeditiva.
Juan José: empecinado, detallista, con humor.
José Mario: su estilo muy varonil, sorpresivo. ¡Ese
“Copete”!
Norma Pagani: sensorial, sensitiva, nostálgica.
Celia Novelli: amiguera, misteriosa.
Capítulo aparte para:
Luis Molina: ocurrente atento y divertido.
Nora: ecuánime, certera, respetando siempre el margen.
María Julia: Hoy, ¿ensalada de frutas o qué?
Varios quedan, porque a pesar de sentarme en un extremo para
poder verlos a todos, algunos se me han pasado. Disculpen. Y…
Paquita: sabia, talentosa, aguerrida, con una gran dosis de
humor, ¡y ese acento y esa voz con que acompaña sus lecturas y que nos ha hecho
disfrutar a todos!
En
este “después” yo, me llevo mucho. ¡No sé ustedes!
No hay comentarios:
Publicar un comentario