miércoles, 10 de octubre de 2018

Recuerdos


Carmen Gastaldi

…acudieron a mi memoria,
acudieron en mi ayuda…

Mientras ordeno mi casa busco en mi memoria, busco sin encontrar, cosas, eventos, acontecimientos, en mis recuerdos para poder armar una historia, pero mi mente se resiste. No hay caso.
Me detengo, brazos en jarra y miro sin ver una pared naranja. De pronto, como una cascada comienzan a aparecer. Recuerdo un pañuelo blanco, arrugado, maltratado, las parras de mi antigua casa, sus hojas y Elena la amiga de mamá, una guitarra nueva estrellada contra una pileta, un sombrero de “ala ancha”, un vaso de vino sobre el mármol del viejo y bello mueble de madera, escondido tras la pata torneada que junto a otras sostenían el cristalero, con su frontispicio finamente tallado…
El perfume del jazmín del Paraguay y de los azahares del naranjo. El duraznero, el laurel y la retama que en primavera pintaba el jardín con un color amarillo intenso como su aroma.
La huerta, producto del trabajo diario y amoroso de mi abuelo. Mi abuelo, su guitarra, la sillita baja a la sombra del naranjo, una foto que permanecerá en mis retinas por siempre, una foto con sonido, con los acordes andaluces que él sacaba, casi todas las tardes de esas cuerdas y, que detrás del tapial de ingreso a la casa, en la vereda, solían escuchar mis vecinos.
Los dormitorios daban al patio, con sus puertas altas, con postigos y, para evitar el sol del verano, las largas cortinas de bambú. Las ventanas adornadas con cortinas tejidas al croché, sus postigos y unas bellas rejas de hierro forjado.
Trasponiendo el comedor que dividía la casa en dos, arribabas al “fondo”. Allí, otra historia: los gallineros, el horno de barro, la higuera, el galponcito, mi gata…
Cada una de las cosas que menciono al comienzo constituye parte de la historia familiar. ¡Hay para contar!
La del pañuelo blanco, arrugado y maltratado, esa solo esa la puedo contar desde el umbral de mi casa hacia afuera.

3 comentarios:

  1. Lo primero que se cruzó por mi mente al leer fue el tango "Cambalache", enumeraste muchas cosas disimiles que formaban tus recuerdos para luego darle la nostalgia de la música del abuelo.
    Me encantó.
    Un abrazo Carmen.

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  2. ¡Cuántos recuerdos parecidos de nuestra infancia y la casa paterna! ¡Qué hermoso evocarlos!
    Me encantó tu escrito.
    Un abrazo
    Susana

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  3. Que bella manera de evocar tus recuerdos!! Cuantas hirtorias hay detras de ellos!! abrazos

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