martes, 19 de septiembre de 2017

La vecina de la calle Santiago

Patricia Pérez

Éramos muy jóvenes, y nuestra meta era comprar la casa.
Por eso, para ahorrar fuimos a vivir a un viejo departamento de pasillo.
Adelante, había una casa que se comunicaba por el costado.
Aquellas construcciones de antes eran todas parecidas: la casa más importante, al frente; y al costado, varios departamentos, a los que se entraban por los patios, tenían el baño y la cocina afuera y las habitaciones de frente a la entrada.
Estaba situado en la calle Santiago entre 9 de julio y Zeballos, muy cerca del Parque Independencia.
En la casa principal vivía una vecina Adelaida, que era muy dispuesta, acostumbrada a vivir sola. su gusto era colaborar.
Un día, me encontraba en avanzado estado de embarazo y mi hijita Paula, jugando con las puertas abiertas me dice: “Mami entró un pajarito”. Ella tenía solo dos años.
Pero el pajarito no era tal. Nuestra vecina sabiendo de mi gran panza, me toca la puerta y me dice: “Nena no te asustes, pero se te metió un ratón”.
Yo les tengo mucho asco y ella lo sabía.
Así que sin dudarlo, tomó la escoba y lo corrió hasta que a escobazos lo hizo pasar a mejor vida.
Siempre servicial ella.
Por suerte, no pasó demasiado tiempo y pudimos acceder a un crédito y compramos nuestra casa.
Nos parecía mentira vivir en un lugar tan nuevo.
Pasaron los años y decidimos ir a visitar a esa mujer, que había sido tan gentil.
Mi marido trabajaba en un banco y a la salida decidimos encontrarnos en la vieja casa para visitar nuestra amiga.
Ella nos recibió muy contenta y para agasajarnos nos invitó con caña Legui.
Yo tenía los chicos muy pequeños, comía cuando los horarios me permitían y muy poco.
Tomé esa bebida. Solo una copita. Estuvimos un rato más y luego nos volvimos en colectivo.
Lo único que recuerdo es que mi marido se tuvo que hacer cargo de los chicos de la descompostura con vómitos y dolor de cabeza incluidos que me agarró. 
Nunca más pude probar la caña, pero siempre recuerdo a esa mujer, que estaba siempre dispuesta a ayudar.

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